miércoles, 26 de diciembre de 2012

Casi deidad

Bastó sentir rodar una lágrima
para darme cuenta que estás adentro;
nunca te he visto
pero creo sentirte sin haber usado el tacto,
nunca hemos cruzado una mirada
pero sueño con reflejarme en la tuya,
nunca te he tocado
y me he visualizado entre tus brazos,
nunca me has besado
y quiero perderme entre tus labios.
A veces creo que no existes en mi mundo real,
eres tal cual te describí sin conocerte,
a veces pienso que yo te creé,
a veces me gustaría sacarte del sueño y vivirte.
Tal vez sea el destino
o tal vez eres un fantasma,
lo triste es que no creo en los fantasmas
ni en el destino,
tal vez por eso no logro verte y solo sentirte.
Eres un hermoso fantasma que logró entrar en mi 
y poseer mis suspiros,
un fantasma que se apoderó de mi y no sale de mi mente,
un fantasma que solo yo veo,
un fantasma con el que quiero volar,
un fantasma que me gustaría tomara vida,
un fantasma que me gustaría
tocar,
sentir,
vivir,
amar...

                                                                                                 Adriana.

jueves, 7 de junio de 2012

Traigo el alma repleta de sonrisas,
llena de tus recuerdos que 
regocijan el existir,
eso es lo que me quedo,
no tu persona, 
nadie es de nadie;
pero sí lo que me haces sentir.
Por eso te comparto unas letras,
hay sensaciones que ni las palabras
alcanzan a describir, 
esas sensaciones que te llenan de vida
y te impulsan a seguir,
esas sensaciones que despiertan 
el más profundo suspiro,
esas sensaciones que le dan
fuerza a los latidos,
esas sensaciones enraizadas
en la memoria,
esas sensaciones que son 
tan mías que ahogan,
esas sensaciones que te llenan
la cara de sonrisas,
esas sensaciones que secan
cualquier lágrima sin fuerza,
esas sensaciones que hacen que 
te hierva la sangre,
esas sensaciones que explican 
el por qué estamos aquí;
eso me quedo de ti,
lo que siento por ti...


                                     Adriana.
Soñando entre tus brazos,
iluminados por la luna,
atenta al susurro de tu pecho,
respirando tu aliento,
leyéndote en Braille,
compartiendo la piel,
inhalando tu esencia,
inmersos en un mismo tiempo,
siendo parte de la misma historia,
con el calor de tus sentidos,
con la fuerza de tus sueños,
la pasión por la vida;
me inspiraste a suspirar, 
cambiando el rumbo de mis sueños
sentí poco a poco 
descongelarse mi sangre,
mientras se despertaban mis latidos
de ese largo sueño,
me incitaste a volver a creer,
a no dejar de sentir,
a dejarme llevar, 
cerrar los ojos,
y confiar...


                             Adriana

domingo, 18 de marzo de 2012

No lo se...

No lo se...
No se si llegue el día que lo sepa,
no se como explicar lo que me haces sentir,
no se si pertenece al hoy, al ayer o al tal vez.
No se describir el lugar al que tus besos me saben llevar,
tal vez es tu aliento,
tal vez tu sabor;
no se si mis labios tengan memoria,
una memoria que va en contra de mi razón.
Tal vez es la fuerza del ayer,
tal vez es ésa añoranza de lo que hubiera sido y no fue,
tal vez es esa duda entre ponerle fin a esa historia
o volver a soñar y disponerme a escribir;
tal vez sea el miedo de revivir eso que alguna vez hirió.
El tiempo nos llevó por caminos distintos
y hoy que apareces,
no se si te quiera volver a conocer
o tal vez prefiera quedarme
con la mejor parte de ese ayer.
Hoy mi razón parece apuntar en dirección opuesta a ti,
sin embargo, me invade esa sensación,
que al pasar los años,
todavía solo tú me has hecho sentir...

Adriana